jueves, 29 de octubre de 2009

3...2...1...

Me aburrí de la realidad. Estoy cansado de que la gente se ate a limites y responsabilidades. Pienso en sumergirme en algún pensamiento ideal y no salir, solo tengo que encontrar el lugar y aprender a empezar de 0. Vivir como siempre quise y ahorrar las penas y olvidos. Vivir.

viernes, 23 de octubre de 2009

Verde...amarillo...rojo...

Cada vez que me paro en la esquina de una avenida y el semáforo no pasa a verde pienso en levantar el pie. E imagino que la propulsión del viento que levanta mi zapatilla va a hacer volar a todos los autos y colectivos que pasan frente a mi. Y yo, feliz, finalmente, llego al otro lado.

Ahora que lo pienso con que poco se conforma mi imaginación...

miércoles, 14 de octubre de 2009

!

Primero es la nada, todo esta bien y mejor que nunca...


Luego los nervios hacen su parte con un molesto ruido que no permite concentrate, y la vida es un ejercicio de respirar hondo y pisar fuerte el piso para sentir que todavía se está en tierra....


Caminar y llegar, escuchar a la gente murmurar mientras el ruido en la cabeza que se torna insoportable.


Subis al escenario, te moves para todos lados, miras alrededor; hasta que finalmente, el primer acorde indica que empieza la función....

martes, 6 de octubre de 2009

Break time III

Lo conseguí. Todo fue muy rápido, pero lo hice:



Me levante a las 7.30 de la mañana. Luego de una rápida ducha, desayune y me preparé para salir en búsqueda de su nombre. Subí al auto y me fui hasta la oficina.
Cuando baje la pude ver a lo lejos, con paso apurado, intentar llegar a la rutina diaria que impone su meta en aquella parada de colectivo. Pensé en ir directo a la misma parada, pero al ver que todavía le faltaba una cuadra y media para llegar, se me ocurrió algo mejor: di media vuelta, me asome a ver si venia el colectivo (generalmente cuando me asomo nunca aparece, solo lo hace cuando estoy desesperado contando/buscando monedas y/o enchufando el mp3) y al notar su ausencia, me dirigí hacia una parada de colectivo que estaba dos cuadras antes. Afortunadamente, la suerte soplándome en la cara impidió que ningún colectivo se asomara en la cuadra y media que había caminado, hasta que lo vi acercarse hacía mi. Corrí y estirando el brazo durante media cuadra logre detenerlo. Pagué el mínimo (ya deje de creer en papa noel, los reyes y los inspectores de colectivo) y me senté en la fila de atrás, que estaba toda libre.
El colectivo no tardó nada en recorrer las dos cuadras que me separaba de ella. Mire hacia la ventana y la vi deteniendo al vehículo con su brazo...




(DEBIDO A ESCASEZ DE POSTS, ESTA HISTORIA SIGUE CONTINUANDO)